Acompañar
Hace unos días vivimos la jornada del Buen Pastor y a nosotras, las Hermanas de Don Orione, nos movía a pensarnos como aquellas que se hacen parte del pastoreo, ¿qué significa eso?
La persona que acompaña no sustituye a Dios, sino que camina junto a la persona acompañada y la anima a leer lo que se mueve en su corazón, que es el lugar privilegiado donde habla el Señor.
Audiencia General del 4 de enero de 2023. Papa Francisco
Las hermanas tenemos, como nuestro fundador, una mirada especial sobre los jóvenes. Nuestra prioridad en nuestro último Capítulo General son los jóvenes, el saber acompañarlos, darles un lugar en cada una de nuestras obras.
Sean madres y hermanas, mientras sanan los dolores del cuerpo, sanen también los del alma.
Carta Magna. Don Orione
Dentro de nuestra Provincia Religiosa conformada por Uruguay, Paraguay, Chile, Argentina y Perú; tenemos algunas hermanas que son parte del Equipo de Pastoral Juvenil Vocacional junto a algunos jóvenes de nuestras comunidades. Ellos piensan actividades y formas de acompañar a los jóvenes.
Nuestro modo de acompañar como Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad a cada joven, es comprometernos con toda su realidad. Podríamos decir poniéndole el cuerpo, dedicándole el tiempo, escucha, mates y mucho más. Es un servicio que nos llena el corazón, saber y poder ver cuántos jóvenes hacen lugar a Dios en sus vidas y los transforma. Algunos que se atreven un poco más, inician un camino de discernimiento de su proyecto de vida y las hermanas que acompañan este proceso, se forman y lo hacen con mucho compromiso.
Contar ante otra persona lo que hemos vivido o lo que buscamos ayuda a aportar claridad en nuestro interior, sacando a la luz los muchos pensamientos que nos habitan y que a menudo nos perturban con sus insistentes estribillos.
Audiencia General del 4 de enero de 2023. Papa Francisco
El Buen Pastor que nos llamó a nosotras a seguirlo es quien nos impulsa a ser testigos de su inmenso amor hacia los jóvenes.
En cada comunidad donde viven las hermanas se intenta trabajar con la parroquia local, con la Iglesia diocesana porque el espíritu orionita nos hace reconocernos hijas de la Iglesia en primer lugar.
Por todo esto y mucho más “acompañar” para nosotras, Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad, es una actitud y un servicio que nos urge.
Recemos por los jóvenes. Recemos por todas las vocaciones.
Hna. Nancy PHMC