5/06/23

Cada 16 de Mayo es una fiesta sin fronteras

Cada 16 de Mayo es una fiesta sin fronteras

En esta fecha tan especial, las diferentes obras de nuestra Provincia religiosa de Guadalupe han homenajeado en fraternidad a Don Orione. De cada punto geográfico donde las Pequeñas Hermanas Misioneras de la Caridad llevamos adelante nuestra obra nos compartieron hermosos momentos vividos para la ocasión.

Durante estas jornadas cada comunidad celebró la Eucaristía en Acción de Gracias a San Luis Orione, junto a diferentes miembros de esta gran familia orionita. Residentes de hogares, colaboradores y voluntarios de las distintas obras, alumnos de las escuelas, familias que acompañaron los diferentes eventos. Hubo procesiones barriales como en Manchay, Perú, y en el barrio de Congreso de Ciudad de Buenos Aires. Algunas comunidades representaron el sueño del Manto Azul de la Virgen, como ocurrió en Sáenz Peña, Chaco, y en Casa Provincial de CABA. En otras, como La Cruz, Argentina, y en Montevideo, Uruguay, se compartió el tradicional cafecito de Don Orione. En este clima de fiesta, no faltaron las tortas de cumpleaños que con creatividad y amor prepararon algunas voluntarias, la oración, los cantos, y los juegos para los niños y las niñas. Como todos los años, en cada aniversario de San Luis Orione compartimos estos momentos tan emotivos unidos en un espíritu alegre y fraterno.

El Santo Apóstol de la Caridad

Don Luis Orione (1872-1940, Italia) fue beatificado por el Papa Juan Pablo II el 26 de octubre de 1980. En esa solemne ceremonia celebrada en la Plaza de San Pedro en Roma, en la que se dieron cita miembros de la familia carismática representando a  los más de veinte países donde el nombre de don Orione es sinónimo de amor a los pobres y al Papa, el Pontífice describió a Don Orione como “una expresión maravillosa y genial de la caridad cristiana”.

Toda su vida fue un camino de santidad, que lejos de quedar encerrada en el ámbito de la Iglesia, pretendió llegar hasta lo más profundo de la sociedad y sus estructuras: “… más que ser santos de la Iglesia seamos santos del pueblo y de la salvación social”, decía Don Orione.

El 7 de julio de 2003, en presencia del mismo Juan Pablo II, se anunció en Roma el reconocimiento del milagro que abría el camino hacia los altares a Don Orione, el Apóstol de la Caridad, un santo para nuestro tiempo.

En la misa de canonización de San Luis Orione, el 16 de mayo de 2004, durante la homilía, su Santidad Juan Pablo II decía “El corazón de este estratega de la caridad no conoció confines, porque estaba dilatado por la caridad de Cristo. El celo por Cristo fue el alma de su vida intrépida, el impulso interior de un altruismo sin reservas y el manantial siempre fresco de una esperanza indestructible”.